 |
| L'arrt de Meik |
Cómo trabajamos
Durante una jornada de 5 a 6 horas trabajamos de manera indirecta los miedos que perjudican a las personas en su propio nivel de desarrollo.
Se proponen ideas sobre "qué son los miedos" y despues de intercambiar ideas grupales se comenza a expresar a través de la música las sensaciones que nos estos nos producen, con ritmo y movilización energética nos proponemos la disolución de los miedos innecesarios y perjudiciales.
Información sobre el tema
El miedo es una emoción que depende en gran medida de la educación recibida, de la cultura y el medio ambiente que nos rodea.
El miedo es natural en todas las personas y tiene como función protegernos de los peligros reales. Y gracias a él sobrevivimos como especie y tenemos reacciones instintivas que no nos cuestionamos pero que nos salvan del peligro.
Puede ir desde el terror intenso hasta una ligera aprensión, de acuerdo con la situación vivida.
Nuestro cuerpo sufre cambios a nivel físico y hormonal al encontrarnos en una situación de miedo: nuestro corazón palpita más fuerte, nos sudan las manos y producimos mayor cantidad de adrenalina.
Entre los miedos naturales y sociales es frecuente sentir miedo al fracaso, al rechazo, a las pérdidas y a los cambios. Tenemos incertidumbres sobre nuestras relaciones, sobre nuestra vida futura y muy especialmente cuando sentimos inseguridad.
Por ello durante toda la vida sentimos miedos. Pero es muy importante aprender a reconocerlos, dado que ellos mismos bien localizados pueden ayudarnos a resolver una situación. Despejando lo que nuestra mente dificulta y enfrentando para resolver la realidad.
Cuando tenemos miedo nuestro sistema se bloquea y no podremos pensar ni actuar con lo mejor que tenemos.
Si sentimos que estamos frente a una posible amenaza es mejor estar claros qué es lo nos puede provoca miedos y nos podemos preparar para manejar la situación a nuestro favor y sus consecuencias de una manera más productiva e inteligente.
Los miedos exacerbados son miedos no encarados correctamente y pueden derivarse en fobias.
El miedo es natural en todas las personas y tiene como función protegernos de los peligros reales. Y gracias a él sobrevivimos como especie y tenemos reacciones instintivas que no nos cuestionamos pero que nos salvan del peligro.
Puede ir desde el terror intenso hasta una ligera aprensión, de acuerdo con la situación vivida.
Nuestro cuerpo sufre cambios a nivel físico y hormonal al encontrarnos en una situación de miedo: nuestro corazón palpita más fuerte, nos sudan las manos y producimos mayor cantidad de adrenalina.
Entre los miedos naturales y sociales es frecuente sentir miedo al fracaso, al rechazo, a las pérdidas y a los cambios. Tenemos incertidumbres sobre nuestras relaciones, sobre nuestra vida futura y muy especialmente cuando sentimos inseguridad.
Por ello durante toda la vida sentimos miedos. Pero es muy importante aprender a reconocerlos, dado que ellos mismos bien localizados pueden ayudarnos a resolver una situación. Despejando lo que nuestra mente dificulta y enfrentando para resolver la realidad.
Cuando tenemos miedo nuestro sistema se bloquea y no podremos pensar ni actuar con lo mejor que tenemos.
Si sentimos que estamos frente a una posible amenaza es mejor estar claros qué es lo nos puede provoca miedos y nos podemos preparar para manejar la situación a nuestro favor y sus consecuencias de una manera más productiva e inteligente.
Los miedos exacerbados son miedos no encarados correctamente y pueden derivarse en fobias.